La crisis europea sigue avanzando su rumbo. La
reacción de los sectores populares y la falta de una salida clara que defina el
rumbo político económico y social en el viejo continente nos hace pensar que,
tal vez, es en Europa donde se está desarrollando la expresión más avanzada del
desarrollo de la lucha de clases.
Los
Estados que supuestamente se habían endeudado entregaron sus gobiernos a
quienes ya tenían el poder, la conocida troika (El Banco Central Europeo, el
Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea), o sea los bancos y el
capital financiero. Los políticos burgueses, en su gran mayoría, lejos de
denunciar y enfrentar esta situación acompañaron y apoyaron todas las medidas
tomadas en contra de la inmensa mayoría de la población. Medidas que, como en
el caso de Grecia, donde el 90% de la población se
opone a estas medidas agudizando la crisis de representatividad política en el
país. Ante esta situación veintidós diputados fueron expulsados del PASOK,
partido griego gobernante, por votar en contra del plan, y otros nueve que se
abstuvieron han sido sancionados, a esto debemos sumarle que otros veintiún
diputados fueron expulsados del partido conservador Nueva Democracia. Esta es
la expresión de una realidad donde la clase política no está a la altura de las
necesidades de las más amplias masas. Los políticos votaron el ajuste y dejaron mansamente los gobiernos
a los economistas del Banco Europeo, estos transformaron las deudas, que eran
de los bancos, en deuda pública, no conforme con eso dicen que la culpa de la
recesión y falta de desarrollo, o sea la caída de la economía de toda la zona
euro, es de los trabajadores, de los empleados públicos, de los jubilados y
obviamente todos tienen que pagar para salvar los intereses de las
corporaciones. Baja en el salario mínimo (25 a 32 %), aumento de la edad para
jubilarse, 150.000 empleados públicos en las calles, congelamiento los salarios
y aumento del desempleo, recorte del presupuesto de salud y creación de empleo
informal (en negro) etc. son solo algunas de las consecuencias del plan de
austeridad implantado.
Frente a
este atropello con el resultado provisorio de gases palos y heridos, grandes
huelgas, paros y manifestaciones, los trabajadores empezaron responder, sin
tener un organismo que aglutine y organice esta resistencia y el avance del
enfrentamiento con los defensores del poder. Durante los
últimos dos años, los trabajadores de Grecia, España y casi toda la zona euro,
han mostrado una enorme combatividad y determinación. 17 huelgas generales y
numerosas manifestaciones y protestas masivas de todo tipo en Grecia, huelgas y
marchas en España donde las centrales obreras han llamado a resistir los planes
de ajuste, lo mismo sucede en Italia, Irlanda, Portugal, Bélgica y los demás
países. No obstante estas medidas adoptadas desde los diferentes sectores del
pueblo no han calado hondo en la política europea y la planificación de ajuste
se siguió implementando con más rigor hasta la fecha.
El avance
de la crisis.
En España
la deuda de las empresas es de 1.5 billones de euros supera el 120% del PBI, es
decir mucho más de lo que produce el pueblo español en un año de trabajo y
explotación, en Portugal es del 130%, en Italia del 80% e Irlanda el 194%.
La
característica común de todos los países europeos en crisis es que han perdido
su autonomía del poder imperial, ya que no les permitirá sobrepasar el límite
del déficit fiscal fijado, deberán aprobar las leyes de ajuste sin importar la
opinión del pueblo ni de los parlamentos y el Consejo de ministros de economía
de Europa será quien decida las políticas económicas y los ajustes en cada
país. Esta crisis tiene como origen el poderío económico tanto de Alemania como
de Francia, países que crearon con la eurozona lo mismo que intento
Norteamérica con el ALCA, NAFTA o los TLC. Es decir comercio entre grandes
economías con un enorme poder, lo que inevitablemente genera un intercambio
desigual entre países y, como es obvio el dinero fluye desde la periferia hacia
el centro, los países se ven avasallados por el dominio y el intercambio
financiero de los más poderosos que imponen precios y políticas regresivas que
producen como vemos la sumisión de las burguesías y Estados más débiles que
terminan como siempre obligando a sus pueblos a pagar la crisis.
Medidas
de salvataje.
Hay una
política mundial que tiene como paradigma a la Reserva Federal Estadounidense y
al Banco Central Europeo, esta consiste en mantener para todo el sistema
financiero mundial prestamos con una bajísima tasa de interés, lo que favorece
todo tipo de especulaciones y digámoslo de una vez la ganancia de los ricos,
mientras que sostiene a través del sistema internacional de préstamos (bancos,
FMI, banco mundial, RF, BCE, etc.) tasas de interés altísimas para los países.
Recordemos también que aunque el Estado siempre fue denigrado por los mercados
que siempre quisieron que se achicara para que no compita con los negocios y
deje que los patrones ganaran todo lo que pudieran, hoy es ese Estado el que
tomando los dineros del pueblo va al rescate de los malos negocios de los
dueños del poder, que hoy saquean impunemente el futuro de la humanidad.
La
máquina de fabricar dólares que tanto criticamos en Norteamérica, que permitió
y permite a los yanquis exportar su crisis inundando el mundo de papeles
(dólares) sin ningún respaldo es imitada impunemente por el banco central
europeo quien emite euros solo a conveniencia de la crisis para salvar al
sistema económico reinante. La creación de empleos mediante el modelo de bajos
sueldos con agencias de trabajo temporal con trabajadores contratados con
salarios mínimos, con la complicidad de los sindicatos y la clase política,
Alemania y Francia en menor medida se transformaron en lo líderes de la
desregulación laboral, por eso mientras en Europa reinaba el estado de
bienestar y los trabajadores tenias buenos sueldos, en estos países centrales,
la burguesía hacia su propio bienestar a costa de la calidad de vida de los trabajadores.
Cambiaba bajos sueldos por pleno empleo, de esta manera sus trabajadores sin
saberlo ayudaron a sus patrones a imponer las condiciones económicas y
políticas en Europa. Decimos que son los países centrales europeos, donde su
realidad imperialista impulsada por una burguesía enriquecida durante la
pos-guerra los que imponen en los demás países de Europa su política sectaria
que termina involucrando a todas las economías de la zona euro, por eso cuando
estalla la crisis global de la economía son estos países donde funciona el
Banco Central Europeo – BCE - , los que reaccionan obligando a las demás
economías a subordinarse al poderío económico que les da el control total de
los resortes económicos de toda la zona y la posibilidad de imponer su posición
ideológica y política.
Por esto
decimos que el imperialismo necesita trasladar la crisis a la periferia para
que esta no destruya su propia economía, no solo roba las arcas de esos países
sino, que recupera el dominio imperial que empezaba a tambalear con su propia
crisis. Crisis de superproducción, crisis financiera por exceso de circulante
(la máquina de fabricar euros, igual a la máquina de hacer dólares, no tiene en
cuenta la explotación y aumenta la circulación de dinero no productivo).
El euro
es una moneda de intercambio regional, no mundial como el dólar, por lo tanto
toda la zona euro tiene una moneda común que le impide devaluar para hacer
competitiva a sus exportaciones y paliar su crisis, cuando el BCE imprime
billetes solo ayuda a los países centrales, Alemania y Francia, que son los
operadores mayoritarios y los que fijan la política monetaria en Europa, sus
bancos son los que manejan el crédito y, son los que deciden los pasos a
seguir. Son los que están tratando de imponer en la periferia todos los ajustes
terribles que van a sufrir los asalariados europeos, todo para salvar a los
dueños del dinero a los patrones y financistas, estos ajustes que tratan de
imponer solo tienen por finalidad recaudar ganancias extraordinarias para
recuperarse de los negocios que hicieron sus burguesías, los que les dieron
enormes ganancias, pero que dejaron un tendal de perjudicados, porque las
economías grandes y poderosas, solo generan comercios desiguales entre las
economías regionales.
Por
ejemplo, si yo vendo aceitunas, pero compro maquinarias agrícolas. La
diferencia entre lo que vendo barato y compro caro, hace que deba mas plata que
la que recibo.
Lo de
abajo se mueve.
Los
economistas y políticos recorren toda Europa, mientras la clase obrera, los
empleados públicos y sectores de la pequeña burguesía también se están
movilizando. Prácticamente no hay país donde no se resistan a estos planes
nefastos, todos saben que resistir hoy día es una cuestión de supervivencia.
La
burguesía y el proletariado europeo hoy están velando las armas. Podríamos
decir que son los primeros ensayos de una clase trabajadora algo adormecida por
el sueño del Estado de Bienestar, respuesta satisfactoria dada por la clase
dominante durante años ante la efervescencia comunista que amenazaba su
supremacía. Existe una necesidad imprescindible de generar organizaciones que
le disputen el poder, que sean capaces de canalizar el profundo odio y
desconfianza que tienen contra los economistas, los burgueses y los políticos.
Sectores que decían representarlos pero, que ante el primer embate de los
mercados se pasaron ideológica y efectivamente al bando del enemigo,
abandonando para siempre al pueblo que deberá crear nuevas y mejores
organizaciones.
La huelga general por 24 hs. ha sido un instrumento
utilizado por los trabajadores, pero la repetición de esta herramienta no
alcanza a torcer el brazo del poder, al no lograr ningún resultado concreto, se
transforma en una lucha estéril. Si bien este método produce en los patrones
pérdidas de mucho dinero, esto no es más que el costo que la clase dominante
está dispuesta a pagar para conseguir la rendición total del movimiento obrero.
De esto se desprende la necesidad de tomar la iniciativa hacia alguna forma de
acción más fuerte, que cambie los métodos organizativos que superen la realidad
sindical y empiecen a dirigirse hacia lo político, organización que
necesariamente debe tomar a toda la población perjudicada para que pueda
enfrentar exitosamente los embates del enemigo.
Como
dijimos al principio la burguesía nos ha declarado la guerra y la lucha de
clases deberá transformarse en guerra de clases en la disputa sobre quien debe
gobernar el mundo, los economistas, los ricos, los asesinos de la humanidad o
los que trabajamos y construimos todo, los que merecemos vivir en un mundo
mejor.